Comprar relojes comparadores – Todo lo que hay que saber

Uno de los factores que indican la calidad de un producto, además de los materiales, es la forma en el que fue construido. Sobre todo, si se realizó en una línea de producción. Del mismo modo ocurre en reparaciones, restauraciones o controles de artefactos que necesitan un gran nivel de precisión.

Para estos y otras aplicaciones dependemos de instrumentos de medición confiables y con la mayor exactitud posible.

En este sentido, existe una herramienta que nos proveerá de todas estas necesidades. Se trata del reloj comparador. También conocido como comparador de esfera, comparador de carátula o simplemente comparador. Aunque no se utilice para obtener medidas absolutas, es esencial en situaciones en la que debamos determinar diferencias entre las mesuras de una superficie o varias de ellas.

Nuestra recomendación: el reloj comparador Mitutoyo 2046SB

Cuando buscamos un reloj comparador de calidad, Mitutoyo es una marca que siempre da garantías en metrología.

Y la gama de relojes de Mitutoyo es una de las más baratas de la marca, se puede conseguir un comparador por menos de 50 euros:

MITUTOYO 2046SB - Reloj contador DIN 878, rango de medición de 10 mm, lectura de 0,01 mm, 1 unidad
  • Rango de medición: 10 mm.
  • 1 vuelta del indicador = 1 mm.
  • Lectura: 0,01 mm.

Si te has quedado con dudas sobre este reloj, que es el que tengo yo en mi taller, te recomiendo que veas te este unboxing para aclararlas:

Accesorios, el soporte para relojes comparadores

Para usar un reloj, necesitas que vaya acompañado de un soporte magnético.

Los soportes magnéticos permiten fijar tu reloj a una superficie de hierro o acero para tomar una referencia fija y medir cualquier desplazamiento de la punta del reloj.

Es un accesorio fundamental pero en el que puedes ahorrar más dinero que en el reloj, comprando una opción más económica como las que te presentamos a continuación:

Partes de un comparador de carátula

Antes de explicar su funcionamiento, es necesario conocer cuáles son sus partes.

  • Capuchón. Su propósito es simple, la de elevar manualmente la punta de contacto. Se debe usar para no dañar el instrumento cuando lo retiramos de una superficie.
  • Aguja principal. La misma indica los valores en centésimas de milímetro. Es la de mayor tamaño y se encuentra en el centro del reloj.
  • Aguja cuenta vueltas. Es más pequeña y asciende en una unidad cada vez que la manecilla principal ha completado un giro, lo que se traduce en 1 mm.
  • Carátula. Es un elemento móvil con marcas impresas que indican los valores de centésimas de milímetro. En algunos casos se pueden leer en ambas direcciones horarias. Además, es posible rotarlas y de este modo hacer coincidir la aguja principal con el valor cero.
  • Vástago de sujeción. Por norma tiene un diámetro de 8 mm y su función es la de servir de superficie a sujetar por una abrazadera. Esta última está aprisionada a su vez a una estructura firme e indispensable para realizar una medición precisa.
  • Eje cremallera. Es el componente que fija la punta de contacto y traslada su movimiento al mecanismo interior.
  • Punta de contacto o palpador. Se trata del elemento que toma contacto con las superficies a comparar. Existen de varios tipos y son intercambiables entre sí, según el propósito.

¿Cómo funciona este instrumento?

Ahora que conocemos qué elementos componen un reloj comparador, ya podemos saber cómo funciona. No sin antes recordar que este es un instrumento de verificación. Es decir que está calificado para medir las diferencias entre distintas longitudes.

Para utilizar este dispositivo es necesario tres elementos adicionales. Una medida patrón, que puede obtenerse de un objeto real. En segundo lugar, una pieza a mesurar. En ella realizaremos las comparaciones con respecto al elemento anterior. Por último, una estructura que sujete al reloj. Existen varios tipos, pero los más utilizados son el soporte universal, el magnético, el deslizable y el de mesa.

  • Una vez fijado el reloj en la estructura, se coloca en posición perpendicular a la superficie del objeto patrón. Este último también debe estar emplazado en una base firme e inmóvil.
  • Algunos soportes cuentan con mecanismos capaces de ubicar el reloj hasta una distancia cero del objeto. Sin embargo, podemos valernos de la carátula rotativa para hacer coincidir la aguja a este valor.
  • Elevamos el punto de contacto desde el capuchón e intercambiamos el objeto patrón por el elemento a comparar.

Las variaciones entre estos dos se verán reflejadas en el desplazamiento de las agujas.

¿Cómo se lee un reloj comparador?

Para leer el reloj una vez realizados los pasos anteriores se debe tener en cuenta el sentido de giro que tuvieron las agujas. Ya que, si se ubica por ejemplo, en el valor 90, puede significar una distancia de 0,9 milímetros positivos en sentido horario o 0,1 negativos en antihorario.

En segundo lugar, el rango y escala del instrumento. Los mismos se indican por el valor máximo del cuentavueltas y por las divisiones de la carátula respectivamente.

Una vez que conocemos estos datos, debemos observar la posición de las manecillas y realizar una suma simple. El número indicado por el cuentavueltas (que muestra la cantidad de mm que se trasladó el husillo) más el valor recorrido por la aguja principal (varía de 0 a 99). El resultado indicará con gran precisión la diferencia de tamaño entre los dos objetos.

Tipos de relojes comparadores

Como muchos de los instrumentos y herramientas de medición, existe una gran variedad de modelos y diseños de acuerdo a las funciones específicas de los usuarios. Sin embargo, podemos distinguir a los diferentes relojes por las siguientes categorías.

Por la forma de lectura

  • Analógicos. Son el tipo más usado resultan confiables y duraderos. Su funcionamiento se realiza a través de engranajes mecánicos.
  • Digitales. Cuentan con un circuito interno que muestran los resultados en un display electrónico. Algunos modelos avanzados ofreces una conexión a ordenadores mediante puerto USB. Son de fácil lectura, pero corren con la desventaja de ser inútiles sin batería.

Precisión y rango de medición

En cuanto a la exactitud de sus mediciones podemos encontrar relojes con precisiones que van de los 0.01mm a los 0.001mm. Escalando además en precio.

En referencia al rango, es extraño encontrar relojes que superen los 10 mm. Sin embargo, pueden hallarse algunos especiales con mayor diferencia de medición.

Orientación

Se refiere a la posición del visor respecto del eje del husillo.

  • Vertical. El operador puede observar las agujas y la carátula desde una postura superior.
  • Horizontal. Dentro de este tipo de relojes, encontramos los simples y doble cara. Estos últimos son capaces de mostrar los mismos valores por ambas caras del reloj.

¿Cuál debo elegir?

Como mencionamos antes, los distintos tipos de comparadores están diseñados para los usos y calidades requeridas por las personas que los van a utilizar. Sin embargo, si estás pronto a adquirir uno y quieres saber cuáles son las características que se adecúan más a tu perfil, podemos ofrecerte algunos parámetros.

  • Marca. Siempre recomendamos que utilices herramientas e instrumentos de fabricantes reconocidos y que cuenten con las certificaciones y normas necesarias de tu región.
  • Rango de medición y resolución. Un factor elemental que definirá tu elección es el propósito que vas a darle al comparador. Dependiendo de ello, elige uno que cumpla con los requisitos que necesitas.
  • Alimentación. Si precisas una lectura rápida y estarás atento al nivel de batería del instrumento, puedes elegir un reloj digital. Si en cambio, prefieres tener la confianza de que el comparador será siempre funcional, es mejor uno analógico.
  • Escala. Puede resultar una recomendación obvia, pero corrobora que los valores indicados sean métricos o en pulgadas según corresponda. Aunque siempre está la alternativa de las escalas mixtas.